Como sucedía (y sigue sucediendo), Potosí tenía varias demandas que no eran atendidas por el gobierno central, en aquel entonces encabezado por Enrique Peñaranda. El pueblo potosino realizó una marcha y un cabildo, a cuya conclusión exigió atención a sus demandas y advirtió que, en caso de no ser escuchado, adoptaría una forma de gobierno acorde a sus intereses.(...) ¿Alguien puede negar que Bolivia ha retrocedido a un centralismo secante desde que el MAS llegó al poder, pese a que la Constitución reconoce diversos tipos de autonomías? ¿Alguien puede negar la prepotencia con que el Gobierno central trata a las regiones?