A propósito de sentencias y el limbo institucionalizado (Erika Brockmann, Brújula Digital, 10.1.24)

Mas allá de las interpretaciones legales en torno a los tardíos fallos emitidos por el TCP, reitero que la reelección discontinua no debiera tener cabida en nuestro ordenamiento constitucional por ser un recurso tóxico del caudillismo que erosiona la democracia. En todo caso, la incertidumbre que acompaña el inicio de año es comparable al estado de situación de un órgano judicial hoy en un limbo embrollado, como muchos otros asuntos en el país. 

https://www.brujuladigital.net/opinion/a-proposito-de-sentencias-y-el-limbo-institucionalizado

 

La utilización de Dios por los políticos (Carlos Derpic, Brújula Digital, 10.1.24)

Sería bueno que muchos políticos, practicando la religión que les parezca (o sin practicar ninguna), dejen de utilizar a Dios para encaramarse en el poder y actuar sin control alguno; y sería bueno que, con humildad y realismo, otros reconozcan que no son los “jesucristos” del siglo XXI.

Por lo demás, el pueblo debe dejar de creer en falsos profetas, que abundan en todo tiempo y lugar.

https://www.brujuladigital.net/opinion/la-utilizacion-de-dios-por-los-politicos

La Ley Omnibus (Antonio Saravia, Brújula Digital, 8.1.24)

Milei está andando el difícil camino que prometió andar. Esta ley les da mayor libertad a los individuos, les protege su propiedad privada, reduce el gasto del gobierno y trata de minimizar la influencia de este (y la de los políticos) en la economía. Habrá que ver qué pasa en el Congreso donde La Libertad Avanza solo tiene 40 diputados y 7 senadores (solo un 15% del Congreso).

https://brujuladigital.net/opinion/la-ley-omnibus

El analista Antonio Saravia no es miembro de Una Nueva Oportunidad. UNO alienta el debate de ideas y no se adscribe necesariamente a los contenidos de este artículo.

El ajedrez de la política boliviana (Edgar Cadima, datapolis.bo, 9.1.23)

Desde mediados del año pasado, el gobierno ha venido realizando unas jugadas políticas maquiavélicas, que no las comparto ya que menoscaban la convivencia democrática y se apartan de un mínimo de ética que debieran tener la política (respeto a las reglas de juego), pero esas jugadas están ahí y hay que analizarlas y responderlas. El oficialismo tiene el control absoluto del Órgano Ejecutivo y en agosto del año pasado, en ocasión de la renovación de las directivas de las cámaras del Parlamento, intentó el control del Órgano Legislativo. Su jugada fue algo torpe y descarada, tomó su tiempo de negociaciones y recién en noviembre se resolvió cuando la oposición, particularmente Comunidad Ciudadana (CC) contrarrestó la jugada obligando a la fracción evista del MAS a firmar un acuerdo de nueve puntos, entre los que se destaca el reconocimiento de la existencia de presos políticos, para habilitar a que su candidato, Andrónico Rodríguez, asuma la presidencia del Senado en desmedro del oficialismo.

https://www.datapolis.bo/2024/01/07/el-ajedrez-de-la-politica-boliviana/

El modelo cubano, el del MAS (Gisela Derpic, Los Tiempos, 7.1.24)

La dictadura cubana cumplió 65 años el 01/01. Día antes lanzó un plan de ajuste que, según dice Demo Amlat el 03/01, “pone fin a subsidios en servicios esenciales y en alimentos, en un intento por detener el deterioro económico y social de la isla, (…) a través del aumento de precios de los combustibles, ajustes en las tarifas de luz y transporte y modificaciones en la tradicional libreta de abastecimiento con la que los cubanos compran productos de la canasta básica a precios subsidiados” (...).Ese desastre es el modelo del MAS para Bolivia, en palabras de Arce Catacora. Sin fuentes de ingresos, con empresas estatales en quiebra, con reservas internacionales a punto de desaparecer, considerando la escasez de los ahorros de los rentistas, abusivamente expropiados por el régimen, sin nadie a quien parasitar a la vista, estar como Cuba es cuestión de poco tiempo. A ver si nos ponemos las pilas, demócratas bolivianos, y construimos la alternativa política victoriosa para recuperar al país.

https://www.lostiempos.com/actualidad/opinion/20240107/columna/modelo-cubano-del-mas